11 de septiembre de 2001, cuatro aviones de pasajeros con rumbo a California fueron secuestrados. Dos impactaron parte del corazón financiero de Estados Unidos, el tercero presuntamente se estrelló en el Pentágono y el cuarto cayó en un campo abierto en Shanksville, Pensylvania. En más de 2 mil 900 personas se estima el número de víctimas fatales.
La cadena hispana Univisión mostró escenas de personas lanzándose al vacío desde las Torres Gemelas. Un camarógrafo de nacionalidad peruana que grabó el horrendo suceso fue entrevistado por la misma televisora, la fatídica noche del 11 de septiembre. Dijo haber visto las señales que hacían los desesperados a través de los agujeros de las llamas en las torres”. “Capté cerca de 12 personas que se lanzaron en un vuelo hacía la muerte”, dijo el nativo de la región andina, al tiempo que confesó haber llorado mientras congelaba en su cámara la catástrofe.
Las Torres Gemelas de Nueva York, ubicadas en la parte Sur de la isla de Manhattan, con 110 pisos y 130 metros de altura, se desplomaron. Estas eran las Torres uno y dos de las siete existentes en ese gran complejo conocido como el World Trade Center. Siete horas después cayó la Torre 7 sin que fuera impactada por ningún avión.
Más de 500 ingenieros y arquitectos en esa ciudad, todos estadounidenses, han solicitado una investigación independiente que explique por qué las versiones oficiales son científicamente imposibles. La primera Torre se derrumbó una hora después del impacto.
Luego de 8 años, persisten las dudas. La Asociación por la Verdad del 11 de septiembre, en su sitio en Internet, www.investigar11s.org, amplía en detalles estas y otras espeluznantes revelaciones que el mundo desconoce. Quizá una de ellas es que no existe un solo precedente histórico en el que una estructura de acero haya cedido producto de intensos incendios.
Hace menos de 6 meses, abril de 2009, la revista The Open Chemical Physics Journal, publicó los resultados de una investigación que se extendió por 18 meses. Los medios tradicionales parecen haberle restado importancia. El artículo se titula: “Material de thermita activo descubierto en el polvo de la catástrofe del WTC del 11-S. Un equipo de 9 científicos, bajo la dirección de Niels H. Harrit, profesor del Departamento de Química de la Universidad de Copenhague, dio con el hallazgo. Esto provocó un gran revuelo en Dinamarca.
El descubrimiento demostró que la nano-termita fue la sustancia encontrada en 4 puntos de Manhattan, en los alrededores del World Trade Center. La nano-termita está compuesta por una mezcla de polvo de aluminio y óxido que genera un intenso calor, logrando una temperatura de 2 mil 500 grados centígrados. Este calor produce hierro fundido que puede ser utilizado para fundir otros hierros, incluso para soldar los carriles de una vía ferrea.
La investigación parece confirmar lo que cientos de profesionales en Nueva York habían sustentado, las Torres no se desplomaron por el impacto ni los incendios, fueron derribadas premeditadamente.
El profesor Harrit, en una entrevista con la televisión danesa explicó que la nano- termita puede utilizarse como un explosivo muy poderoso, con más energía que la dinamita y viable como combustible de cohetes.
El científico reveló el motivo de su investigación: “Cuando ves caer un tercer edificio de 186 metros y 47 pisos, en 6,5 segundos, 7 horas después de que se desplomaran las Torres Gemelas, como científico que eres, dices, wao”. Se refería a la Torre 7, conocida también como el edificio Salomón Brothers.
Los resultados de esta investigación fueron entregados al vicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden y a varios congresistas en Washington, sin que hasta la fecha haya ocurrido nada.
Los electores del país más poderoso del planeta permanecerán atentos, querrán comprobar si es cierto que su presidente está dispuesto a romper paradigmas. Abrirá Barack Obama las puertas que nos lleven a conocer las verdades ocultas tras la sombra del 11 de septiembre?
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